Este disco tiene un valor específico extraordinario porque fue grabado
en los recitales que Lluís Llach ofreció en el Palau dels
Esports de Barcelona, los días 15, 16 i 17 de enero pasado, con motivo
de su reaparición pública después de más de nueve
meses de prohibiciones gubernativas constantes. Todo el espíritu de
aquellas tres magníficas asambleas populares, demostración
perfecta de la solidaridad existente en el país relacionado con todo
eso que hace referencia a nuestra conciencia democrática queda recogido
en el álbum. Y Llach y sus músicos nos ofrecen unas interpretaciones
de gran calidad, en la línea de constante superación estilística
del cantante del Ampordán
Jordi García-Soler (abril 1976) |